La historia de las abejas parece un cuento de hadas. Son seres que revolotean alrededor de la luz del sol; se alimentan del dulce néctar y del polen nutritivo de las flores que es justamente la clase de alimentación que les gustaría a las hadas...Tienen sus reinas y sus princesas; poseen sus esclavas obsequiosas; y entre ellas también hay zánganos. Habitan en castillos encantados en los que penetran algunas veces enemigos terribles, contra los cuales han de emplear los más admirables sistemas de defensa; tienen disgustos contiendas y, lo que es peor, tragedias espantosas. Cometen todos los años un sinnúmero de asesinatos, que a ellas no les parecen crímenes, pues no hacen sino cumplir las leyes instituidas por la Naturaleza, para el buen gobierno de su pequeña república. Son constructores y arquitectos estupendos; poseen, como las aves, el don de orientarse en el aire para volver a su vivienda. Los sentidos de la vista, gusto y olfato se hallan en ellas sumamente desarrollados; y es tan grande sus sociabilidad, que se mueren en cuanto están privadas de la compañía de sus congéneres.
¿de donde procede la maravillosa organización de las abejas de colmena? Para los partidarios de la evolución, las abejas representan el orden mas elevado dentro de un grupo de seres que han venido perfeccionándose durante el transcurso de largos siglos.
El Tesoro de la juventud
domingo, octubre 8
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